miércoles, 21 de octubre de 2009

De los que se van

Hay gente que promete y promete y después de haber metido nada de lo prometido, ok no iba a decir eso pero mi mente me juega malas pasadas. Bueno empiezo de nuevo:
Hay gente que promete cosas o que te dicen como son. Siempre que se describen te dicen cosas buenas, como no, porque si te dicen que son unos asquerosos interesados pues pierdes el interés por ellos al minuto.
A día de hoy aún confío en la buena fe de la gente y me suelen dar palos que me dejan "doblá". Hoy sin ir más allá he recibido uno bien gordo. Un buen "amigo" me deja en la estacada por una nimiedad, cosa que he estado pensando que ya llevaba tiempo gestando la operación "escurrirelbulto".
Ok, supongo que ya no le resulto tan graciosa y chispeante como de costumbre, ya que tengo problemas gigantescos y eso ya le aburre.
Y lo jodido del caso es que siempre me ha caído de puta madre y me ha sentado como un jarro de agua fría. Coño, que he estado leyendo el mail y me he puesto a llorar. Porque no te lo pierdas, me ha comunicado "el cese de la amistad" por mail. Jodidos artefactos del Diablo.
Donde se ponga un cara a cara de los de antes que se quiten los teléfonos, los internets y la madre que los parió.
Luego me he sentido invadida por el espíritu de Cela y me ha venido a la mente la frase siguiente (que no es de él, por cierto):
Un amigo es aquel que llega cuando todos se han ido.
Joder, cuanta razón. Ahora mismo puedo contarlos con los dedos de una mano, y suena a tópico pero es verdad. Para la coña, las risas y fiestas aparecen amigos como champiñones pero cuando estás por los suelos desaparecen como cucarachas cuando hechas Cucal en la cocina de un restaurante chino.
Total que me he sentido XOF porque me han hecho PLAF. Más claro.....agua.
En fin,......otra pena más que hace que se me doble un poco la corona. ¡Malditos!

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